domingo, 28 de febrero de 2021

SI NO CUMPLES LA MISIÓN, ¿QUÉ MÁS PODRÍAS HACER? - EZEQUIEL 15

 


Hay árboles que sirven para hacer muebles hermosos y sin famosos por su buena madera. Pero, ¿para qué sirve la “madera” de la vid? La vid no sirve como árbol de madera sino por los frutos que da. Así, Israel era una vid, ¡qué privilegio y responsabilidad! No obstante, el texto de hoy refiere que Israel como vid, era infructuosa, ¿para qué serviría?
Una vida infructuosa no es gratis. Una vida sin frutos es el resultado de una vida sin el “abono” espiritual. ¿Qué fruto podrías dar si te la has pasado viviendo sin estar conectado a la sabia de vida que es Cristo?
Cuando vemos a personas infructuosas en la vida no es porque no tengan las capacidades intelectuales o físicas sino porque han deteriorado su condición espiritual que no los hace capaces de dar frutos, por tanto son infructuosos, y a esas personas la Biblia las llama “INÚTILES” (Mateo 25:30) y solo sirven, al igual que Ezequiel 15, para ser quemadas. Esto es duro y muy fuerte pero es lo que dice la Biblia.
Dios escogió al pueblo de Israel para ser una luz en medio de las naciones oscuras. La idea de Dios al entregar una buena tierra a Israel (también a Israel) no era adornarlos nada más y hacerlos preferenciales sino para que las demás naciones fueran convertidas por las prácticas de Israel. ¡Cuán bueno es Dios! Dios quería ensalzar a un pueblo pero no para que viera de reojo y menosprecio a los demás sino para responsabilizarlos de los demás. Hay cristianos en este tiempo que creen que son superiores a los demás, simplemente por saber las profecías de Daniel y Apocalipsis o por dominar el griego o el hebreo. ¡No! ¡Cuánto mas bendecido más responsabilidad para hacer las cosas bien, para evangelizar!
Jamás debemos olvidar que las bendiciones no se quedan solo en el plano de disfrute. Necesitamos ser conscientes de una responsabilidad misionera de cara a lo que Dios necesita de mí y eso que me ha dado lo terminamos perdiendo, porque nos convertimos en inútiles o infructuosos.
En el pasaje que hemos leído, Dios pregunta en que se diferencia la leña de la vid de la madera de los árboles del bosque: “Hijo de hombre, ¿en qué supera la leña de la vid a la madera de los árboles del bosque?” (Ezequiel 15:12). La vid es una rama que delgada y ondeada y así no sirve para nada, ni para un mueble, ahora ya cortada es peor. Es que si no somos útiles para la obra de Dios no seremos útiles para nada. Quien no entienda que su vida ha sido diseñada para servir a Dios se irá muriendo en vida.
Dios obra en nuestra vida es con la finalidad de producir frutos, y si no le damos los frutos, nosotros mismos estamos echando a la basura todo lo que Dios mismo nos quiere dar. El problema de la gente hoy es que quieren el Evangelio de bendiciones pero huyen de las responsabilidades que tiene este. Oremos por bendiciones pero seamos responsables para usarlos en favor de otros, llevándoles el evangelio de Cristo.
¡Hoy es un nuevo día! Vayamos a Dios y pidamos ayuda para ser personas útiles en su obra, que lleven mucho fruto, que seamos responsables con las bendiciones que Dios nos ha entregado. ¿Amén? Porque de otro modo, no serviremos para nada sino para ser quemados y hollados. Estamos vivos aún, hay oportunidad. ¡Dios es bueno! ¡Cumplamos la misión!
¡Feliz día!
Pr. Heyssen Cordero Maraví

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...