¡NO TE SUELTES DE LA MANO DE JESÚS! - MIQUEAS 1

No te puedes imaginar qué tan bajo puedes caer si te sueltas de la mano de Jesús. Cuando la vida del ser humano se aleja de Dios no es capaz de imaginar qué tanto mal puede hacer. Solo basta ver con las noticias y notar que existen personas que son capaces de quitarle la vida a otra persona simplemente por robarle un celular. ¿Cómo puedes explicar que propios hijos quitan la vida de sus padres por un pedazo de tierra o un poco de dinero? ¿Cómo explicar los abusos sexuales que cometen propios padres contra sus hijos? La gente, la sociedad puede llamarle locura, enfermedad, un trastorno mental, pero la Biblia le llama PECADO: “el pecado es la transgresión de la Ley” (1 Juan 3:4), pero es la manifestación de una vida dominada por el enemigo, por el diablo (1 Juan 3:8). Sin embargo, una vida dominada por el pecado es simple y llanamente alejarse de Dios. Soltarse de la mano de Jesús. ¿Y qué podemos hacer lejos de Dios?

Miqueas profetiza contra Samaria y Jerusalén, capitales de Israel y Judá respectivamente. Ambos reinos son descendientes de David, el pueblo escogido de Dios. Israel y Judá con hijos de la promesa hecha a Abraham, Isaac, Jabob, Moisés... no son pueblos “ignorantes”, no son pueblos “paganos o gentiles”, son pueblos escogidos de Dios. Son los que supuestamente deben tener a la Ley de Dios como su derrotero o su única regla de autoridad y fe, pero no, no lo fue, no lo era... en cambio, dice Miqueas: “Y todas sus estatuas serán despedazadas, y todos sus dones serán quemados en fuego, y asolaré todos sus ídolos; porque de dones de rameras los juntó, y a dones de rameras volverán” (Miqueas 1:7). ¿Qué te parece? ¿Cómo podrían ser idólatras gente que sabía bien sobre la ley de Dios y habían visto a través de generaciones cómo Dios los había guiado?

El pueblo de Israel y Judá, los que tenían a la ley de Dios a la vista, simplemente ignoraron y rechazaron vivir como mejor les parecía. Ellos erigieron altares e ídolos a dioses falsos. Es más, en algunos casos, reemplazaron la verdadera adoración por una falsa en el mismo templo de Jehová. Triste pero real.

Hoy es un nuevo día, ¿cómo estás? Quizás estás alejándote poco a poco de las manos de Dios. Esta pandemia te ha quitado el trabajo, la paz mental y espiritual, y las diversas pruebas han hecho que te vayas soltando de la mano de Jesús “sin darte cuenta” y ahora estás a punto de cometer cosas que de seguro te vas a arrepentir. Tranquilo, calma, NO TE SUELTES DE LA MANO DE DIOS, el brazo poderoso de Jesús sigue ahí, firme y fuerte para sostenerte. Solo debes sujetarte a Él cuál niño a su padre o madre para no caer. Pero si por cosas de la vida ya te has soltado y has caído bajo, MIRA AL CIELO así cómo estás, arrepiéntete y levanta cabeza porque Dios sigue estando ahí para PERDONARTE Y CARGARTE. ¿Amén? Abandona ya lo malo que vienes haciendo.  Tú sabes que separado de Dios nada bueno existe. NO TE SUELTES DE LA MANO DE JESÚS.

Así como no imaginas qué cosas bajas puedes hacer si te sueltas de Jesús, déjame decirte que tampoco puedes imaginas qué cosas lindas y hermosas puedes hacer si estás sujetado de la mano de Cristo. 

¡Feliz día!

Pr. Heyssen Cordero Maraví

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