¡PREDICA AUNQUE NO QUIERAN ESCUCHAR! CUMPLIENDO LA MISIÓN EN TIEMPOS DIFÍCILES - AMÓS 7:12-25

El cumplimiento de la misión que Dios encomienda a sus hijos jamás fue fácil. Del Génesis al Apocalipsis es evidente lo complicado que resulta ser un profeta, evangelista, discípulo, apóstol  o predicador cumpliendo fielmente la misión. Ya lo dijo Jesús: “Mirad, yo os envío como ovejas en medio de lobos” (Mateo 10:16), mostrando que  somos enviados a cumplir la misión en medio de peligros serios.

Amós denunció el pecado de Jeroboam, rey de Israel, quien levantó lugares altos para adorar a becerros y más dioses falsos, aunque él decía que era en honor a Jehová, disimulando así un sincretismo religioso abominable. ¿Serías capaz de denunciar y condenar los pecados y corrupciones del presidente de tu país? ¿Tendrías el valor de denunciar a tu jefe o a tu empleador? Bueno, Amós denunció los pecados y atrocidades de Jeroboam, rey de Israel.

Ante esto, Amasías, sacerdote de Bethel, intenta persuadir a Amós para que deje de profetizar en Israel y por el contrario se vaya a Judá (reino del sur). Amasías le dice: “Vidente, vete, huye a tierra de Judá, y come allá tu pan, y profetiza allá; y no profetices más en Bet-el, porque es santuario del rey, y capital del reino”  (Amós 7:12,13).

¿QUÉ COSA NO LE PUEDES DECIR A UN PROFETA O EVANGELISTA SEGÚN EL CORAZÓN DE DIOS?

1. HUYE.- Esto es imposible. Un verdadero discípulo de Jesús, un Evangelista o predicador según el corazón de Dios jamás HUYE, jamas SE VA SIN CUMPLIR LA MISIÓN. Retroceder nunca rendirse jamás. 
2. PROFETIZA ALLÁ.- Esto es imposible. Un verdadero discípulo de Jesús, un Evangelista o predicador según el corazón de Dios jamás hace caso a hombres, JAMÁS OBEDECE A SERES HUMANOS CUANDO ELLOS HABLAN TODO LO CONTRARIO A LA PALABRA DE DIOS. ¿Qué tal?
3. PORQUE ES SANTUARIO DEL REY.- Esto también imposible. Un verdadero discípulo de Jesús, un Evangelista predicador según el corazón de Dios jamás predica para seres humanos, acomoda su mensaje para no perder popularidad o para que sea invitado y considerado por gente que le gusta “agua con azúcar”. UN EVANGELISTA PREDICA CON UN “ESCRITO ESTÁ”, aunque esto no sea popular, parezca anticuado y retrógrada.

¿CÓMO PUDO TENER EL VALOR PARA PREDICAR CON PASIÓN, sin miedo, en obediencia A DIOS y con un ESCRITO ESTÁ?

La Biblia dice: “No soy profeta, ni soy hijo de profeta, sino que soy boyero, y recojo higos silvestres. Jehová me tomó de detrás del ganado, y me dijo: Ve y profetiza a mi pueblo Israel” (Amós 7:14,15).

1. LLAMADO POR DIOS.- Esto es clave. El texto dice que Amós sabía quien era él (un pastor de ovejas) y quien era Dios (el supremo del universo). Si NO entiendes que fue Dios quien te llamó, vivirás haciendo las cosas de miedo, dudando y hasta abandonado el sentido de la misión real para irse tras filosofías huecas.
2. HABLADO POR DIOS.- No escuchó la voz de un gran gurú de filosofía. No. Amós predicaba con denuedo porque DIOS LE HABÍA DADO ESA MISIÓN. Y es que es bueno recordar que la misión no nace en el corazón del hombre sino en el corazón de Dios. Entonces, el profeta estaba seguro de haber escuchado la voz de Dios, y cuando la voz de un hombre (por más sacerdote que haya sido) habló directamente, simplemente hizo caso omiso. ¿Por qué ? PORQUE CONOCE LA PALABRA DE DIOS Y NO SE DEJA ENGAÑAR.
3. OBEDIENTE A DIOS.- Cuando reconoces la voz real de Dios cada día, cada mañana, podrás ser OBEDIENTE A DIOS, y CUMPLIRÁS CON LA MISIÓN, aunque todo el mundo te diga que no debes ni puedes hacerlo.  ¡Cuánta obediencia! A pesar de que su vida está en peligro, fue fiel y predicó hasta el final EL MENSAJE DE DIOS LE HABÍA ENCOMENDADO. “Y donde manda capitán, no manda marinero”. Y cómo dijera Pedro: “es necesario obedecer a Dios, antes que a los hombres” (Hechos 5:29).

Hoy muchos admiran a los predicadores, evangelistas, misioneros, y hasta anhelan ser como ellos. Muchos  imitan palabras y formas, y esto sucede porque vivimos en tiempos de paz. Hay algunos problemas, sí, pero no se comparan a predicar en medio de un pueblo corrupto, a morir decapitado como lo fue Juan Bautista, o terminar los días como mártires tal y como sucedió con los discípulos. Cumplir la misión siempre difícil, pero Dios siempre acompañó y fortaleció, y eso mismo nos dice hoy.  

Predicar con Un Escrito Está, aunque este mensaje no sea el más popular, siempre será lo mejor. 

¡Feliz día!

Pr. Heyssen Cordero Maraví 

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