“Poned, pues, ahora vuestros corazones y vuestros ánimos en buscar a Jehová vuestro Dios; y levantaos, y edificad el santuario de Jehová Dios, para traer el arca del pacto de Jehová, y los utensilios consagrados a Dios, a la casa edificada al nombre de Jehová” (1 Crónicas 22:19).
Estuve reflexionando estos días en Mateo 6:33, quizás, uno de los versículos más completos y profundos de la Biblia. El texto hace referencia claramente en cuál debe ser nuestra búsqueda cada día, y qué es lo que obtendremos como añadidura. El versículo es claro, pero soy consciente que en menor o mayor proporción, somos tentados a centrar nuestra búsqueda de Dios en oración y en estudio de su Palabra, movidos por las AÑADIDURAS. ¿Haz orado en estos últimos días fervientemente por algo? ¿Oraste por tener una comunión más grande y real con Dios o tus oraciones se han centrado en un problema por resolverse, un pedido de salud o financiero? Tu respuesta indicará si tu búsqueda es por mejor relación con Dios o las añadiduras.
Pues bien, el texto de hoy, en todas las palabras de David para su hijo, así como para los principales de Israel, tiene ese tenor, mostrar la prioridad de las cosas en la vida de un hijo de Dios:
1. BUSQUEN A DIOS: “Poned, pues, ahora vuestros corazones y vuestros ánimos en buscar a Jehová vuestro Dios” (v.19). Acá se centra el éxito de toda persona, familia, pueblo o empresa. BUSCAR A DIOS DE TODO CORAZÓN Y CON TODO ÁNIMO, es decir fervientemente. ¿Hace cuánto tiempo no te arrodillas al pie de tu cama o al pie de tu escritorio? ¿Hace cuánto tiempo no te conmueves por la Palabra de Dios hasta las lágrimas? Y no, esto no es “fanatismo”, “misticismo”, es DERRAMAR NUESTRAS VIDAS ANTE EL ÚNICO QUE PUEDE, ante Dios. Si queremos éxito con nuestros hijos, salud, trabajo y demás, BUSQUEMOS A DIOS como el que puede y quiere nuestra felicidad. DIOS QUIERE AYUDARNOS, busquémosle como un hijo busca a su padre porque él no puede, pero su padre sí.
2. LEVÁNTENSE: “y levantaos”. La raíz hebrea de la esta palabra es “QUM”, y tiene que ver con levantarse para atacar. Es una palabra usada generalmente para luchar. “No te levantas bostezando”, como cuando te levantas de cama después de dormir, no. Es un levantarse para una acción, listo, pronto, presto, con determinación. Esa debe ser nuestra actitud cada mañana, cada día, el de levantarnos para luchar contra el enemigo y sus asechanzas por doquier.
3. EDIFIQUEN: “y edificad el santuario de Jehová Dios, para traer el arca del pacto de Jehová, y los utensilios consagrados a Dios, a la casa edificada al nombre de Jehová” (v19). No nos levantemos sin buscar a Dios, no salgamos a trabajar o a realizar cualquier desafío sin antes buscar a Dios en primer lugar. Finalmente, toda nuestra búsqueda y acciones deben llevarnos a la ADORACIÓN. Todo lo que debe hacer el ser humano es propiciar la verdadera adoración en todo aspecto, en todo tiempo y lugar.
Dios en primer lugar, lo demás puede, debe y tiene que esperar. Así de simple y sencillo. No te levantes no edifiques sin antes BUSCAR A DIOS.
Feliz día.
Pr. Heyssen Cordero Maraví
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