PADRES FIELES, HIJOS FIELES: DISCIPULANDO A LA NUEVAS GENERACIONES - JUECES 2

“Y toda aquella generación también fue reunida a sus padres. Y se levantó después de ellos otra generación que no conocía a Jehová, ni la obra que él había hecho por Israel” (Jueces 2:10).

Todo tiene una explicación si se lo busca. Y al leer el segundo capítulo de Jueces podemos notar con claridad, cómo es que el pueblo de Israel se perdió: LAS NUEVAS GENERACIONES NO CONOCÍAN A JEHOVÁ Y NO SABÍAN LO QUE HABÍA HECHO POR ISRAEL. ¿Qué legado estamos dejando a las nuevas generaciones? ¿Somos conscientes de que nosotros no viviremos por siempre y que nuestros hijos, nietos, bisnietos y tataranietos serán quiénes continúen el legado que empezaron nuestros padres y continuamos nosotros?

Padres desobedientes solo pueden formar hijos desobedientes. No pretendamos tener hijos vencedores o triunfadores si nosotros no somos padres vencedores ni triunfadores. Un ejemplo vale más que mil preceptos, y como alguien dijera: “la gente generalmente se olvida de lo que decimos, pero jamás se olvida de lo que hacemos.” Y es que el ejemplo arrastra. 

Los israelitas que quedaron después de la muerte de Josué no hicieron caso a lo que Dios les había dicho. La Biblia refiere: “mas vosotros no habéis atendido a mi voz. ¿Por qué habéis hecho esto?” (Jueces 2:2). Los israelitas habían hecho pacto con los cananeos, aceptaron vivir junto a los cananeos y sus costumbres. Dejaron de lado todo consejo de Dios, y vivieron sus anchas, sin límites. ¿Cuál fue el resultado de todo ello? LAS NUEVAS GENERACIONES VIVIERON SIN EL TEMOR A JEHOVÁ. 

¿Cómo es vivir lejos de Dios? 

“Después los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de Jehová, y sirvieron a los baales. Dejaron a Jehová el Dios de sus padres, que los había sacado de la tierra de Egipto, y se fueron tras otros dioses, los dioses de los pueblos que estaban en sus alrededores, a los cuales adoraron; y provocaron a ira a Jehová. Y dejaron a Jehová, y adoraron a Baal y a Astarot” (Jueces 2:11-13). 

En estos versículos podemos notar nítidamente qué consecuencias trajo el no haber sido padres fieles, obedientes a Dios y a su Palabra. 

¿Qué tipo de padres somos? ¿Nuestros hijos serán fieles en el futuro? Hoy es el día. Seamos padres fieles, para que nuestros hijos también lo sean. 

Feliz día.

Pr. Heyssen Cordero Maraví 

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